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jueves, abril 21

Drum'n'bass

Lista de canciones:

01 / Jean Wetzel / Touchez Pas Au Grisbi / 3:27
02 / Sonny Criss / Don't Blame Me / 2:36
03 / Doctor Jazz's Universal Remedy / My Favourite Swings / 4:45
04 / [re:jazz] / Rita (Dusty Remix) / 4:07
05 / Charles Afton / Fast Cars, Naked Women / 4:45
06 / Yonderboi / Pabadam / 3:36
07 / Slowpho / Lovetech / 3:29
08 / Athome Project / I Move On / 4:29
09 / Howard Maple / Riddim Checka Part One / 4:06
10 / The Lushlife Project / Soul Reservation Morning / 6:55
11 / Xploding Plastix / Joy Comes In The Morning / 4:36
12 / Amon Tobin / Horsefish / 4:45
13 / Amon Tobin / Bloodstone / 3:59
14 / Venetian Snares / Szerencsétlen / 4:51


Lo ideal es escuchar la reco tal cual:

Reco entera (postbocks)

Para quien no tenga paciencia, aquí están los 14 temas (pinchables en Spotify):

Playlist de Spotify


Empezamos con dos temas de jazz clásico muy tranquilos, grabados ambos en París: Touchez Pas Au Grisbi (1) en 1954 y Don't Blame Me (2) en 1962. La harmónica de Jean Wetzel y el saxo alto de Sonny Criss me dejan sin palabras.

A continuación dos reconcepciones contemporáneas del hard bop, dos cruces perfectos entre el jazz y los ritmos electrónicos: Doctor Jazz's Universal Remedy, proyecto germano-italiano y [re:jazz], puramente alemanes.

My Favourite Swings (3), con su fabulosa trompeta, es de 2007, mientras que Rita (4) es de 2010.

La cosa se tranquiliza, aproximándose al terreno del ambient y el lounge, con Charles Afton y su Fast Cars, Naked Women (5). El hilo conductor es el sello Kriztal Entertainment, por el que también ficharon los dos artistas anteriores.

Hasta ahora hemos tenido dos temas de jazz puro, dos temas de jazz electrónico y uno de electrónica sin jazz. A partir de aquí el jazz va a desaparecer y la electrónica se va a endurecer, pero el húngaro Yonderboi nos da unos últimos coletazos de jazz con su Pabadam (6), de sugerente vibráfono.


Más adelante escucharemos a más artistas húngaros, pero ahora le toca el turno a la imparable Noruega: Slowpho, Athome Project, Howard Maple y Xploding Plastix son todos noruegos y todos han grabado para el sello de Tromsø Beatservice Records, auténtico filón en plena Laponia.

Lovetech (7) me parece un temazo, a caballo entre el trip-hop y el drum'n'bass (ah, y con una guitarrita jazzera también). I Move On (8) supone ya un drum'n'bass más contundente y Riddim Checka Part One (9) evoca a formaciones de hindúes londinenses (increíble que esta música se produzca en Noruega).

Todos estos temas son progresivos, con una atractiva evolución interna y una excelente producción. The Lushlife Project nos devuelven a Hungría, con un drum'n'bass mucho más ambient o trip-hop. Musicalmente no pasa nada por mezclar a húngaros con noruegos (solo faltaría), pero es que culturalmente las concomitancias entre magiares y esquimales son tremendas. El álbum del que se extrae Soul Reservation Morning (10) se llama Budapest Eskimos (MOLE Listening Pearls, 2005) y no es una ocurrencia peregrina si uno se documenta sobre la historia de las migraciones de los magiares y los orígenes de las lenguas ugro-finesas, que por supuesto no van a ser objeto de análisis aquí.

La plácida tregua del proyecto de vida exuberante (Lushlife Project) se corta de raíz con la última representación noruega de esta entrega: Xploding Plastix, cuyo nombre no defrauda. Joy Comes In The Morning (11) es una trepidante exhibición de marcialidad cibernética con ínfulas de ternura (por los paréntesis con arpa y vibráfono).

Mi primera audición de este tema me trajo inmediatamente a la memoria al Amon Tobin del Supermodified (Ninja Tune, 2000), otro cruce entre el leftfield y los breaks en el que el genio brasileño dota de vida a una miríada de robots con forma de insectos o monstruos marinos en un alarde de fecunda creatividad.

Y claro, la evocación de Tobin me llevó a explorar trabajos suyos más recientes que los que ennoblecen mi estantería desde hace más de un lustro, con el maravilloso hallazgo del Foley Room (Ninja Tune, 2007), hasta el punto de no haber querido privarme de incluir en esta reco dos temas consecutivos extraídos de dicho álbum.

En primer lugar introduzco la etérea Horsefish (12), que tiene en común el arpa con el tema de Xploding Plastix. El genio de Amon Tobin escapa a cualquier catalogación, cocinando un producto de ritmo y estructura libérrimos que provoca placer y emoción. La arpista de Horsefish es Sarah Page.

Después mezclo Tobin con Tobin metiendo la sublime e intrigante Bloodstone (13), con cuerdas a cargo del Kronos Quartet.

La guinda la pone otro monstruo: Venetian Snares y su Szerencsétlen (14), obra maestra del breakcore orquestal. Ráfagas de terroríficas cuerdas y temibles pizzicatos conjugadas a la perfección con descargas de criminales breaks. Pura tensión y adrenalina. El solo de bajo intermedio no hace sino incrementar el suspense y el pavor. Espeluznante.

sábado, diciembre 11

Viaje al electro-pop

Lista de canciones:

01_Donald Byrd_I Love The Girl
02_Air_Tropical Disease
03_Pet Shop Boys_King Of Rome
04_The Irresistible Force_Fish Dances (Plaid Remix)
05_Coldcut_Panopticon (Irresistible Force Mix)
06_Biosphere_Les Fleurs Du Mal (excerpt)
07_Erlend Øye_Symptom Of Disease
08_Röyksopp_You Don't Have A Clue
09_Empire Of The Sun_Standing On The Shore
10_Big Face_I Wanna Be A Style Crusader (DatA Remix)
11_Late Of The Pier_Space And The Woods (Cenzo Townshend Mix)
12_Rex The Dog_Circulate
13_Yelle_A Cause Des Garçons (Obsession Remix)

Lo ideal es escuchar la reco tal cual:

Reco entera (darkaudio)

Para quien no tenga paciencia, aquí están los 13 temas (pinchables en Spotify):

Playlist de Spotify

Comenzamos con el trompetista Donald Byrd y su balada I Love The Girl (1), extraída de su álbum de 1969 para Blue Note Fancy Free. El piano eléctrico de Duke Pearson hace que esto no sea jazz puro y encaje con lo que viene detrás.

El dúo de Versalles AIR (2) añade ritmo a estos inicios tranquilos de la reco, aunque la melancolía sigue estando muy presente.

Con Pet Shop Boys seguimos etéreos, pero King Of Rome (3) deja entrever, pese a su midtempo, que es pop lo que se avecina.

Los dos siguientes temas (4-5) son piezas del ambient experimental del sello Ninja Tune de 1999. The Irresistible Force es un alias de Mixmaster Morris, que participa en ambos temas -firma Fish Dances (4) y remezcla Panopticon (5) -. Coldcut es un dúo de culto que no necesita presentación: son los creadores del mítico sello Ninja Tune.

El drum'n'bass de The Irresistible Force tiñe de tensa calma la plácida atmósfera que hasta ahora nos envolvía.
Las Flores Del Mal (6), claramente inspiradas en Baudelaire, abren un paréntesis noruego en la reco, formado por los temas 6 a 8. Biosphere es el nombre de guerra de Geir Jenssen (ex-Bel Canto) y Les Fleurs Du Mal son una reinterpretación del ilustre compositor noruego electroacústico de los '60 Arne Nordheim.

Erlend Øye, colaborador de Röyksopp y miembro del dúo Kings Of Convenience, grabó su álbum Unrest en 2003 viajando por todo el mundo para registrar una canción diferente con un productor distinto de cada localidad visitada. Symptom Of Disease (7) se grabó en Turku (Finlandia) con Mr. Velcro Fastener. Indisimulado electro sazonado con la mortecina voz de Øye.

El círculo noruego lo cerramos con los inconmensurables Röyksopp acompañados por la inconfundible voz de la ex-Bel Canto Anneli Drecker. You Don't Have A Clue (8) es un himno agridulce de íntima emoción. Pegadiza, elegante, sofisticada, amorosa, bailable... Para autofustigarse con radiofórmula pinchándola una y otra vez. Si esto es comercial, que canonicen a Adam Smith.

De Noruega pasamos a Australia. Empire Of The Sun sólo tienen un álbum: Walking On A Dream (2008), pero al haber sido distribuido por multinacionales (Virgin, EMI, Astralwerks) llegará al gran público. Standing On The Shore (9) es una canción fascinante, con coros que evocan a Bacharach, riffs guitarreros, un ritmo 4x4 tan bailable como el house... todo en uno, con paso firme y elegancia. Todo un descubrimiento.

I Wanna Be A Style Crusader (10) incrementa los riffs y nos mete ya en el electro a saco. Es un temazo ecléctico incatalogable: un órgano misterioso, ráfagas atormentadas de electro que entrecortan el flujo del resto de voces, guitarras lastimosas, aullidos punk... Una pena que de este Big Face no sepamos prácticamente nada: sólo conocemos este single, editado por su propio sello Big Face y por la boutique parisina (y sello discográfico) Kitsuné.

Late Of The Pier, irresistiblemente británicos, se encaran con pose punk para producir un electro-rock atrevido, divertido y agresivo. Space And The Woods (11), que también fue single, se extrae del único disco del grupo, Fantasy Black Channel (2008).


Kitsuné también es responsable de los dos últimos cortes de la reco: Circulate (12), electro instrumental, obra del misterioso personaje Rex The Dog; y A Cause Des Garçons (13), electro-pop a cargo de la bretona Yelle.

domingo, mayo 4

Electrónica, ¿por qué no?

Esta guía de audición sólo tiene sentido leída antes, durante o después de haber escuchado esto:

Escuchar (stream)

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Lista de canciones (tracklist)

El principio de esta reco es un bálsamo para los oídos: la tierna voz de France Gall, el amable acordeón de Gus Viseur, la misteriosa flauta de Bobby Jaspar y los prodigiosos saxofones de Don Byas y Joshua Redman. Entre estos dos últimos hay una larga pausa de 7 segundos totalmente premeditada. Aun tratándose de dos temas muy tranquilos, los estilos y épocas a los que corresponden distan un abismo entre sí, por eso lo más respetuoso era separarlos invitando a paladear el post-gusto del primero antes de entrar con el segundo.

El final de Cottage For Sale es el paradigma de cómo debe acabar una canción. Justo lo opuesto a las florituras de otros saxofonistas como Sonny Stitt, Sonny Rollins o el mismísimo Lester Young. Don Byas alcanza la excelencia por el camino de la sencillez y la sobriedad.

Joshua Redman es otro monstruo. Los registros lastimosos de su saxofón están llenos de matices. Parece increíble poder expresar tanto con un simple instrumento.

Redman abre la recopilación a las puertas de la modernidad. Il Neige es de 1966; Nuages, compuesta por Django Reinhardt, fue grabada en 1962; Flamingo, en la que Blossom Dearie toca el piano, data de 1956; y Cottage For Sale se grabó en 1952. En cambio, salta a la vista que We Had A Sister es posterior y, en efecto, Joshua Redman grabó ese disco (Wish) en 1993.

Tras Joshua Redman escuchamos a la inconfundible Sade, con la preciosa War Of Hearts. Su smooth jazz permite enlazar el siguiente corte: un temazo de jazz-funk a cargo de B Baker Chocolate Co. Bajos saltarines, sintetizadores… Nos encaminamos hacia el final vanguardista y abstracto de la recopilación.

Con Corduroy alcanzamos el clímax en cuanto a ritmo. Ahí la reco pega un frenazo en seco para introducir el exotismo de Martin Denny, Grundik & Slava, etc. A partir de entonces las texturas y los ritmos le ganan terreno a las melodías y un autor tras otro escapan todos hábilmente del etiquetado del crítico musical.

Ese final electrónico de mid-tempos heterodoxos probablemente sonará muy obsoleto dentro de unos años, pero ahora mismo parece más imaginativo y libre que otras tendencias cibernéticas más encorsetadas por rigurosos cánones como el house o el trance.

Por ejemplo, Ming & FS suelen hacer hip-hop y drum’n’bass, pero 80 Watt Parker no es catalogable ni como lo uno ni como lo otro. Bueno, lo mejor es oírlos, así que con esto termina el comentario a esta recopilación.
Febrero de 2006

martes, abril 15

Corrupción progresiva

Esta guía de audición sólo tiene sentido leída antes, durante o después de haber escuchado esto:

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Lista de canciones (tracklist)


David Rose compuso Gay Spirits en 1946. Este prolífico autor es el padre, entre muchas otras obras, de Bonanza, La Casa De La Pradera y The Stripper.

Gay Spirits ejemplifica a la perfección la música ligera y facilona de Rose, caracterizada por unos vientos que llevan la melodía como si fueran un coro y unos metales que hacen de simple acompañamiento percusionista. Poniendo bien el oído se aprecia perfectamente el muy distinto rol que juega cada sección.

Tras Gay Spirits escuchamos a Lalo Schifrin, que interpreta Murmurio, compuesta por Djalma Ferreira. Esta canción se extrae de Piano, Strings And Bossa Nova, de 1962, disco producido por Creed Taylor, fundador más tarde del sello CTI (Creed Taylor, Inc.), que tantas satisfacciones nos dio a los amantes del jazz-funk en los ’70. Schifrin es famoso por componer Misión Imposible, entre otras. Murmurio es un diálogo entre el piano de Schifrin y su sección de vientos, con una suave percusión brasileña de fondo.

Esta pieza casa bastante bien con la que le antecede debido únicamente a los violines, ya que el piano y la ausencia de metales son palpables diferencias con el tema de Rose. Tiene mucho más carácter (aquí no hay tanta mojigatería: Lalo aporrea el piano con firmeza y decisión), pero aun así guarda las formas y es una canción elegante y exquisita.

A continuación viene Mr. Kiss Kiss Bang Bang interpretada por Shirley Bassey. Con este tema de John Barry damos un paso más: tanto la orquesta como la vocalista son deliberadamente exageradas, como si la hipérbole fuera la única forma de expresividad. El papel se cumple a la perfección si tenemos en cuenta que todo se hace en loor de James Bond. Con esta canción de 1965 el dramatismo de la recopilación toca techo. Ahora la voz cantante la llevan, aparte de la vocalista, obviamente, los metales y la percusión, más capaces de impresionar que los vientos. El otro recurso en que se apoya Barry es el de subir y bajar bruscamente la intensidad, creando unos contrastes más llamativos aún. Puro exhibicionismo.
Y hablando de exhibicionismo, el tema The Stripper es lo más chabacano que uno se puede echar a la cara: cómico, desvergonzado, casi grosero. Hemos cruzado la línea: si la pomposidad de Barry quedaba al borde del abismo de lo hortera, con Joe Loss y Su Orquesta hemos caído de lleno en la más hilarante ordinariez. El tema se hizo mundialmente famoso por la película The Full Monty, de 1997, pero vio la luz como disco ya por 1962 y había sido compuesto incluso antes, en 1958, para un programa de televisión. Destaco dos notas de la canción: la primera es el hecho de que David Rose sea su compositor (¿qué quedó de la inocencia de Gay Spirits, la ñoña canción con la que se abre la recopilación?; viva la versatilidad); y la segunda, el papel de la batería (una batería en el sentido roquero de la palabra), que convive perfectamente con la orquesta y se pega unas parrafadas tremendas (si no, prestad atención a los últimos acordes del tema).

Luego tenemos el tema de la película They Call Me Mr. Tibbs, de 1970, en la que Sidney Poitier da vida a un detective que investiga el asesinato de una prostituta. La trama no es cómica y seguro que tampoco lo era la intención de Chaquito & His Band (¡joder, si es cómico hasta el nombre!), al grabar la canción. No, en serio. Ni el Chaquito éste ni Quincy Jones, responsable de la banda sonora, quisieron producir un tema risible. Estoy convencido. Pero el paso del tiempo hace estragos y lo que en una época es lo más in treinta años después te hace morir de risa.

Y si no que se lo digan a Juan Carlos Calderón. Éste pertenece a la saga de autores españoles de jazz-funk orquestal, junto a Alfonso Santisteban y el inconmensurable Augusto Algueró. Mafioso es un temazo que hoy puede resultar cómico, pero que sin duda es altamente meritorio.

Volviendo al tema de Chaquito, al margen de la sonrisa que nos haga esbozar su audición, es una maravilla: metales estridentes, órgano hammond, parece mentira que sea un tema sólo de 1970: esto es setentismo en su máximo apogeo.

Y el de Juan Carlos Calderón tiene una guitarra funkilona y un bajo saltarín apoteósicos. Es un tema riquísimo: órgano, percusión, coros, orquesta… hasta una mandolina, quizá con la misión de evocar el oscuro origen mediterráneo del protagonista de Mafioso. El talento de TVE al servicio de la moda (extranjera) imperante. ¿Franco no se dio cuenta de esto? La verdad es que el Generalísimo ya no estaba para muchos trotes.

Max Greger introduce la recopilación por el camino del rhythm'n'blues. Soul House, aparentemente compuesta por Lex Humphries, está magníficamente interpretada por esta big band europea, la mejor jamás formada según cuenta la leyenda. Greger era alemán y se rodeó de músicos de toda Europa con los que tenía que hablar en inglés, pues pocos de ellos sabían alemán, formando una big-band a la altura de las mejores de USA. La televisión pública, en este caso, también fue la mecenas de esta orquesta. Y es que esto daría para una tesis doctoral: papel de las televisiones públicas en los años 60 y 70 en el florecimiento de formaciones musicales de calidad.

Aunque lo parezca, Pure Cane (a cargo de Sugarman Three) no es un clásico de los setenta. Dicho técnicamente, no pertenece a la era funk sino a la oleada retro-funk de finales de los 90 y principios del 2000. Los dos temas siguientes se extraen de las recopilaciones del sello Blow Up, que se nutre de grabaciones sesenteras y setenteras de la BBC para radio y TV (volvemos al patrocinio público).

La predominancia del bajo en el último de los cortes me dio la idea de cambiar de tercio en la recopilación. Tras Teenage Chase metemos a The Clash y, como diría Alfonso Guerra, a esta recopilación ya no la conoce ni la madre que la parió.

Como resumen de los primeros diez temas podemos decir que la reco arranca en los años cuarenta desde premisas inocentes y orquestales (Rose); después mantiene la orquestalidad, pero su inocencia se va corrompiendo, pasando por varios estadios: vigor (Schifrin), exhibicionismo (Barry) e impudicia (Loss); a continuación la orquestalidad también se intoxica con la presencia de instrumentos ajenos (batería, bajo, guitarra, órgano…) y de tendencias contemporáneas (rhythm'n'blues, funk…) que terminan por excederla y hasta extinguirla.

La segunda mitad de la recopilación son otros diez temas.

La canción de The Clash The Guns Of Brixton es una de mis favoritas dentro de esa piedra angular que es el London Calling de 1979. Como curiosidad, es la única del álbum compuesta por Paul Simonon (a los de Columbia se les fue la olla y ponen en los créditos Paul Simon!!!). Es un reggae muy personal, con letras de confrontación social y una actitud claramente punk en el vocalista. Cuando el bajista es el autor de una canción se suele notar, y aquí ocurre esto.

De ahí pasamos a un reggae más puro, con los Mussington Brothers, que versionan el clásico de John Lennon Imagine. Estos caribeños son capaces de inundar de alegría hasta la mayor de las melancolías.

El reggae está emparentado con dos géneros musicales: el dub (por la parte más ambiental, lenta e instrumental) y el ska (por la parte más acelerada, bullanguera y radical). Los dos temas siguientes son de dub, ese estilo musical cuyo origen son las caras “B” de los singles de reggae. Para no resultar academicista, me limitaré a subrayar una sola característica del dub (inconfundible): que la voz humana sampleada se convierte en un instrumento más. Esto es fácil de apreciar en el tema de Fermín Muguruza.

No sé por qué los ambientes underground y radicales son tan proclives al reggae. Supongo que para esta gente Jamaica, Bob Marley, el Che Guevara y la marihuana están juntos en el mismo saco. El comienzo de ese maridaje lo tenemos en el punk (ya hemos visto cómo The Clash flirtearon con el reggae, y eso que The Guns Of Brixton puede ser uno de los exponentes más disimulados de ese flirteo).

Y en España tenemos a Fermín Muguruza (si me lee me mata, por lo de España). Al líder de Kortatu le encantan el reggae, el ska, el dub y The Clash. De hecho, ha versionado como mínimo dos temas del London Calling (Jimmy Jazz y la propia The Guns Of Brixton). La verdad es que no puedo más que alabarle el gusto. Además, el tío no es tonto: para mezclar su tema Urrun Dub se ha pillado al Mad Professor, que es una eminencia en la materia (y, bueno, decir que se lo ha pillado para que se lo mezcle, tratándose de un dub, es como decir que se lo ha pillado directamente para que se lo grabe).

Si hay otro monstruo del dub aparte de Mad Professor, de King Jammy y de King Tubby, ése es Lee 'Scratch' Perry. El tema Hole Of Death de Perry sigue al de Mad Professor y si pegan uno a continuación del otro no es de extrañar, pues ambos artistas son tan afines que llegaron a grabar juntos en una ocasión.
La siguiente canción es Kingdom Come, de Godflesh. Esto es dub maligno. La voz susurrante del cantante parece amenazar con la llegada del juicio final. Y todos los efectos dub van en la dirección de atormentar el ambiente.

A Godflesh les siguen Download (el que quiera hacer una búsqueda de este grupo con el Google lo lleva jodido). Download practican un downtempo minimalista y experimental, con abuso de la electrónica y guiños tanto al drum’n’bass como al dark ambient.

Amparado bajo la misma oscuridad fluye el drum’n’bass, ya evidente, de Happy Campers, con el tema No Mind. Atentos al cambio de Download a Happy Campers porque encontré unos acordes tan parecidos en ambas que parece que la mezcla está hecha en estudio.

E-Z Rollers (Synesthesia) le dan un poco de vidilla a la cosa. Su ritmo es más rápido y agresivo. Drum'n'bass radical (no para los fans de culto del jungle, pero sí para el público en general al que van dirigidas estas recos).

El tema de Plateau es intrigante y más experimental aún que los anteriores. Al final su ritmo se vuelve totalmente lineal y admite ser mezclado con un tema house.


En efecto, la última pista del disco es un tema clásico de jazz-house a cargo de Dennis Ferrer, uno de los grandes fichajes del sello Large. Palisade Park supone un alivio después de la fricción de Chateau Plateau. Volvemos a los orígenes: jazz-funk, hammond y una trompeta portentosa, la de Leron Thomas, que es un auténtico músico de jazz en activo que, al margen de estas colaboraciones discotequeras, se dedica a dar giras con su quinteto.

La segunda parte de la recopilación ha sido mucho más actual, electrónica y vanguardista. Comenzó de la mano del reggae, el punk y el dub, para ensombrecerse después con dark ambient, downtempo experimental y drum’n’bass, volviendo a mostrarnos la luz al salir del túnel con un tema de elegante y luminoso house al estilo más tradicional.

Al final, si sirve para algo esta recopilación, igual que todas, es para proclamar la grandeza de la música, su variedad y calidad, y descubrir los extraños compañeros de cama que puede uno encontrarse a lo largo del camino.
Octubre de 2004