domingo, abril 13

Para los más osados

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Osada recopilación que sólo gustará a los más atrevidos. El que no la soporte tendrá que admitir que usa la música como mero pasatiempo. El que simplemente la tolere podrá considerarse aficionado a la música a nivel avanzado. Y al que la disfrute a la primera lo condecoraremos con la medalla al gran melómano del siglo.

¡Abajo los convencionalismos, arriba la imaginación!

La reco es un homenaje a la música marginal, a lo irrecopilable. Géneros presentes: dark ambient, modern classical, exotica, psicodelia, garaje, punk, psychobilly y parodia.

A la vez sirve de tributo a Alemania, aunque la presencia germana no es tan grande como a simple vista pudiera parecer. Sí son alemanes Die Toten Hosen, Die Ärzte y Klaus Nomi. Lacrimosa también, aunque editen sus discos desde un sello suizo. No lo son, en cambio, ni Die Sonne Satan (El Satán Del Sol, pseudónimo del italiano Paolo Beltrane) ni Anne-Sofie von Otter (prestigiosa mezzosoprano sueca cuyos músicos de cámara sí tienen apellidos escandinavos).


De los alemanes puede destacarse su megalomanía y su sentido del humor. Grandes puestas en escena y mucha orquestalidad (Lacrimosa, Klaus Nomi) en plan ópera. Luego son cafres y sosos como ellos solos cuando quieren tocar palos como la música latina. El oyente no se ha librado del castigo de oír Guantanamera por Die Toten Hosen, pero sí de un Mambo a cargo de Herbert Grönemeyer que estaba preseleccionado para esta reco y al final fue descartado por pésimo. Con más o menos gracia, hay que reconocer que los alemanes son dados a la parodia (Die Toten Hosen y por supuesto Klaus Nomi, el cachondísimo icono gay protomártir del SIDA en 1983). Especialmente mordaz es la versión que hacen Die Toten Hosen de Guantanamera convirtiéndola en Cunt In A Mirror (el que desconozca el significado de cunt en inglés que recurra al diccionario).

La reco experimenta con la subjetividad de la noción del tiempo: los 3 primeros temas ocupan en conjunto 18 minutos, lo mismo que los 7 temas que van del 9 al 15. Que el oyente juzgue cuál de esos dos pasajes se le antoja más largo.


Abrimos con Alio Die, monstruo italiano del ambient experimental. Escoltada por dos italianos (el otro es el mencionado Paolo Beltrane) tenemos a Tori Amos versionando nada menos que a Slayer. La lúgubre pianista está a la altura de la atroz letra de Raining Blood. La frase original death will be their acquaintance la cambia por death will be their acquisition, que viene a significar lo mismo, aunque me gustaba más la otra (conocerán la muerte, tendrán una cita con la muerte). La primera palabra encaja con la urgencia del thrash de Slayer, mientras que la última permite a la Amos darle a la frase una cadencia más solemne.

Lacrimosa hacen un modern classical de la máxima grandilocuencia, conjugándolo con goth y metal. Son pasajes orquestales, oscuros y largos, todo lo contrario de lo que se avecina: punk urgente y garaje sencillo.

A modo de puente tenemos temas como la canción de cuna Broken Bicycles, compuesto por Tom Waits, la joya exótica de Out-Islanders Moon Mist, con una vocalista a lo Yma Sumac y un saxofonista a lo Sonny Stitt (cortesía de Ultra-Lounge) y un par de muestras de la psicodelia clásica: Love y Tyrannosaurus Rex. Ellos representan el triunfo definitivo de la guitarra en la recopilación.

Los temas guitarreros se han dispuesto formando el típico crescendo: cada salto de un tema a otro supone dar un pasito más hacia la radicalidad sonora, que toca cima con el psychobilly de The Cramps (autores de este género gore).

Es poco asequible, pero habrá a quien le guste (espero).
Marzo de 2006

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